Microcuento
Marta es delegado comercial en una Multinacional de Servicios Médicos y Farmacia, estudió Químicas, es una mujer de carácter, luchadora y le encanta su trabajo, tiene pasión por las personas y es una excelente comercial que destaca año tras año por sus logros y resultados.
Próximamente su
empresa va a organizar un Congreso de medicina en EEUU, dónde acudirán como invitados
especiales John O'Keefe y
el matrimonio noruego May Britt Moser y Edvard I. Moser,
nada más y nada menos que los premios Nobel de Medicina galardonados por su
brillante carrera en la investigación del cerebro y su descubrimiento del "GPS
interno" que posibilita la orientación en el espacio.
O'Keefe ha estudiado el papel que tiene el hipocampo en la memoria espacial y la orientación, la cual se pierde significativamente en trastornos como el Alzheimer.
Marta
es una apasionada de la Neurociencia y
anhela organizar este Congreso. La oportunidad de felicitar personalmente a los Premios Nobel! Ufff... su ¡¡SUEÑO!!
Durante largos años el padre de Marta padeció la terrible enfermedad de Alzheimer sin que la ciencia pudiera hacer
nada! Esa
sensación de impotencia ha dejado en Marta una dolorosa huella, por eso este descubrimiento tiene una connotación muy especial para ella.
Mientras desayuna con
un compañero, espera expectante la llamada de su jefe.
Por otra parte está
confiada. Ha trabajado muy duro este año superando en un 30% el objetivo, se ha
posicionado la primera en el ranking de ventas y sus resultados son excelentes, sonríe...
Suena el teléfono,
su mirada nerviosa se cruza con la de su
compañero, es el jefe….
- Buenos días Marta
- Buenos días Ramón, ¿cómo estás?
- Bien, bien, gracias. Marta, ya se ha determinado la
organización de los próximos Congresos, tú te encargarás del que se celebrará
en Venecia, en Mayo.
La sonrisa se le borra de inmediato
- ¿El de Venecia Ramón?
- Sí, ese estará bajo tu responsabilidad
- ¿Y el de EEUU? ¿Se ha anulado?
- No, jajaja, cómo vamos a anular nuestro ¡Congreso
estrella del año!
- Pero…. Y.. ¿a quién se le ha asignado?
- A Peter McCarthy, él es americano
- Pero… Ramón… yo hablo un inglés perfecto, tú lo
sabes
- Bueno, no te preocupes Marta, ya está decidido no
pasa nada. En marcha con el de Venecia y sabes que cuentas con mi apoyo en todo.
Te dejo que entro en una reunión, Hasta luego
- Hasta luego Ramón…
Marta no da crédito a lo que acaba de oír, le han dado el Congreso a otro ¡porque es americano!
¿Dónde ha quedado su
esfuerzo, sus logros, sus resultados, su perfecto dominio del inglés? Todos saben que ese
Congreso es un “premio” y se lo han dado a alguien que ha descendido al puesto nº 40
del ranking, que no ha cubierto objetivos y que no destaca por ningún logro. ¡Esto no puede estar pasando!
Con el gesto
contraído y aturdida, deja el teléfono sobre la mesa
Su compañero le
pregunta:
- ¿Qué ha pasado Marta? ¿No
te lo han dado?
En ese momento estalla!
- ¡No, no me lo han dado! se lo
ha dado a McCarthy, ¿Qué te parece? dice que por el idioma, ¡menudo logro!
Ramón es un misógino, imbécil,
cretino, estúpido y no es digno del puesto que ocupa como Director de División, ¡menudo profesional! , ¡le odio! ¡No es justo! Además él sabe lo mucho que significa
ese Congreso para mí, es un …. etc.. etc…
Marta desahoga esa tremenda frustración
con su compañero y se explaya a gusto en toda una serie de improperios contra
su jefe…
De pronto,
mira el teléfono y ve que la llamada no
se ha cortado, su jefe ¡¡lo ha oído todo!!….. y .....por un momento, entra en pánico.
Dime, ¿qué harías tú
para salir con Éxito de esta situación?
Esther de Paz
PD: Te invito a leer el desenlace que he colgado en los comentarios del blog
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